sábado, 14 de julio de 2012

AGRADECIMIENTO

Hace unas dos semanas, tuve un percance en el Metro de Madrid. Me sentí indispuesta, terminando en urgencias de un hospital.
La verdad es que nunca me había pasado, y por supuesto no creí que me fuese a pasar. O sea lo de siempre, eso le pasa a los demás, pero no a mi.
Afortunadamente no iba sola, venía de bailar. Cosa que hago tres o cuatro veces por semana, y la persona que me acompañaba, por supuesto estaba a mi lado pendiente de mi. Pero lo que más me sorprendío fué como dos conductores del Metro de Madrid, se acercaron para prestarme ayuda, y no dudaron en llamar a la persona de seguridad, y a su vez al SAMUR.
La atención fué de un diez de nota. Todos me ayudaron y el médico me aconsejó aquello que tenía que hacer, ya que esta indisposición fué ocasionada por el vértigo que desde hace años padezco, y que de vez en cuando se hace presente con mayor intensidad.
Como digo acabé en urgencias en el hospital, por necesidad de poner el estómago de nuevo a funcionar.
Una vez hecha esta premisa, a lo que yo me quería referir, es al buen hacer de los seres humanos. Porque cuando estaba tan mal, se acercaban personas jóvenes, tanto chicos como chicas, para ayudarnos. Asi como también personas extranjeras, que sin hablar español, intentaban en su idioma interesarse por lo que me estaba pasando, y querían ayudar.
En muchas ocasiones, pensamos que "mira que si me acerco, y luego hay otras personas compinchadas y esto es una pantomima". Yo no se vosotros, pero yo si lo he pensado. O soy yo sola la malpensada, estoy segura de que no.
Es cierto que todos tenemos una psicología, lo suficiente para captar si existe algo raro, pero también es verdad que a veces no, y nos podemos encontrar con un compartamiento desagradable.
Estoy segura que esto que me ha pasado, me ha servido para cambiar mi forma de pensar y de comportame, si alguna vez me encuentro con alguien que necesita de mi ayuda.
También me ha servido, para comprobar como la juventud, aunque no nos guste a veces como visten, o como se expresan, etc. a no catalogarla a toda por igual, porque hay un gran porcentaje de ellos, que son muy solidarios, y no reparan en nada a la hora de ayudar, no tienen los perjuicios ni la sombra de la duda, que tenemos los mayores.
Por lo tanto mi reflexión de hoy es mi voto de confianza para NUESTRA JUVENTUD  Y PARA LA SOLIDARIDAD DEL SER HUMANO.